Erik Erikson, otro de mis teóricos favoritos
Erik Erikson, otro de mis teóricos favoritos nos regala la definición de una persona madura como alguien “tolerante de las diferencias, cautelosa y metódica en sus decisiones, justa en su juicio, circunspecta en su acción y capaz tanto de tener fe como de sentir indignación”
Aunque sabia y monumental, y contemplando -visionaria- temas de vigencia actual candente, su descripción, edificada sobre el mundo de reconstrucción expansiva y ordenada de la posguerra, hoy día puede sonar inalcanzable, idealizada.
Hoy el principio de adaptación a la realidad, parece ser el asidero psíquico más firme.
Lo que puede ser intentado cotidianamente -con el auxilio de la auto conciencia- es que la adaptación no transite, inadvertidamente, a su nivel previo; la modalidad pre-psíquica de sobrevivencia.
